Cómo conservar remolacha hervida
La remolacha, también conocida como betabel o betarraga, es una verdura muy versátil y nutritiva que se puede utilizar en una amplia variedad de platos. Ya sea en ensaladas, sopas, jugos o como guarnición, la remolacha siempre agrega un toque de color y sabor a nuestras preparaciones.
Si tienes remolacha hervida y te preguntas cómo conservarla para poder disfrutarla más adelante, estás en el lugar correcto. En este artículo te daremos algunos consejos y técnicas para conservar adecuadamente la remolacha hervida, manteniendo su frescura y propiedades durante el mayor tiempo posible.
1. Enfriar correctamente la remolacha
Después de hervir la remolacha, es importante enfriarla rápidamente para detener el proceso de cocción. Esto evitará que se ablande demasiado y pierda su textura crujiente. Una vez que hayas cocido la remolacha, sumérgela en agua fría durante unos minutos hasta que se enfríe por completo.
2. Pelar la remolacha
Una vez que la remolacha esté bien fría, es hora de pelarla. Puedes hacerlo fácilmente utilizando tus manos o un cuchillo, asegurándote de retirar toda la piel. Si prefieres no mancharte las manos, puedes usar guantes para pelarla.
3. Cortar la remolacha
Una vez pelada, puedes cortar la remolacha en rodajas, trozos pequeños o rallarla, dependiendo del uso que le quieras dar en el futuro. Recuerda que cuanto más pequeños sean los trozos, más rápido se cocinarán al momento de utilizarlos.
4. Método de conservación: congelación
La congelación es una de las mejores formas de conservar la remolacha hervida por largos periodos de tiempo sin que pierda su calidad. Para congelarla, sigue estos pasos:
– Coloca las rodajas o trozos de remolacha en una bandeja para hornear cubierta con papel encerado. Asegúrate de que estén separados entre sí para evitar que se peguen.
– Mete la bandeja en el congelador y deja que la remolacha se congele completamente, esto puede tomar aproximadamente 2 a 3 horas.
– Una vez congelada, retira la remolacha de la bandeja y colócala en bolsas o recipientes herméticos aptos para congelador. Etiqueta cada bolsa o recipiente con la fecha de congelación.
– Vuelve a colocar la remolacha en el congelador y guárdala hasta por 6 meses.
Para utilizar la remolacha congelada, simplemente sácala del congelador y descongélala en el refrigerador durante varias horas o déjala a temperatura ambiente. Puedes agregarla directamente a tus preparaciones o calentarla antes de consumirla, según tus preferencias.
5. Método de conservación: refrigeración
Si prefieres no congelar la remolacha, también puedes conservarla en el refrigerador por un período corto de tiempo, aproximadamente de 3 a 5 días. Para hacerlo, sigue estos pasos:
– Coloca las rodajas o trozos de remolacha en un recipiente hermético.
– Añade agua fría al recipiente hasta cubrir completamente la remolacha.
– Cierra el recipiente y colócalo en el refrigerador.
Recuerda que la remolacha refrigerada no durará tanto como la congelada, por lo que es importante consumirla dentro del plazo de tiempo recomendado.
6. Recetas para utilizar la remolacha conservada
Ahora que sabes cómo conservar la remolacha hervida, es hora de poner manos a la obra y disfrutar de su versatilidad en diferentes preparaciones. Aquí te dejamos algunas ideas:
– Ensalada de remolacha: combina la remolacha en rodajas con hojas verdes, queso de cabra, nueces y aderezo balsámico para una ensalada fresca y colorida.
– Sopa de remolacha: mezcla la remolacha rallada con caldo de verduras, cebolla, ajo y especias para obtener una deliciosa sopa caliente.
– Smoothie de remolacha: añade la remolacha congelada a tu licuadora junto con frutas como plátano, piña y naranja para obtener un smoothie nutritivo y refrescante.
Conclusión
Ya no tendrás que preocuparte por desperdiciar remolacha hervida, gracias a estas técnicas de conservación podrás disfrutarla en cualquier momento. Tanto la congelación como la refrigeración son métodos efectivos para mantener la remolacha fresca y lista para utilizar en tus recetas favoritas. ¡Pruébalos y sorpréndete con la versatilidad de esta deliciosa verdura en tu cocina!
¡A disfrutar de la remolacha conservada!