Cómo cocer las espinacas
Las espinacas son una verdura muy versátil y nutritiva que se puede incorporar en una gran variedad de platos. Para disfrutar de sus beneficios y su sabor único, es importante aprender a cocerlas correctamente. En este artículo, te enseñaré paso a paso cómo cocer las espinacas para que queden tiernas y deliciosas.
1. Elige las espinacas adecuadas
Antes de comenzar a cocer las espinacas, es importante asegurarse de elegir las más frescas y de mejor calidad. Busca hojas de color verde intenso y que estén libres de manchas o marchitez. Además, es recomendable optar por espinacas orgánicas, ya que suelen ser más saludables.
2. Lava las espinacas
Una vez que tienes las espinacas seleccionadas, es el momento de lavarlas adecuadamente. Para ello, sigue los siguientes pasos:
– Llena un recipiente grande con agua fría.
– Coloca las espinacas en el agua y remuévelas suavemente para eliminar cualquier suciedad o residuo.
– Deja reposar las espinacas en el agua durante unos minutos.
– Retira las espinacas del agua y escúrrelas bien.
3. Elimina los tallos y nervios
Para que las espinacas queden tiernas y fáciles de comer, es necesario eliminar los tallos y nervios duros. Puedes hacerlo de dos formas:
– Utiliza un cuchillo afilado para cortar los tallos y nervios más gruesos.
– Arranca los tallos y nervios con las manos, separándolos de las hojas de espinaca.
4. Cocina las espinacas al vapor
La mejor forma de cocer las espinacas es al vapor, ya que así se conservan mejor sus nutrientes y su sabor. Para ello, sigue estos pasos:
– Llena una olla con agua y coloca un cestillo de vapor en ella.
– Lleva el agua a ebullición.
– Coloca las espinacas en el cestillo y tápalo con una tapa.
– Cocina las espinacas al vapor durante aproximadamente 5 minutos o hasta que estén tiernas.
5. Enfría y escurre las espinacas
Una vez que las espinacas estén cocidas al vapor, es importante enfriarlas rápidamente para detener la cocción y preservar su color y textura. Para ello, sumerge las espinacas en un recipiente con agua fría durante unos segundos y luego escúrrelas bien.
6. Exprime el exceso de agua
Cuando las espinacas estén bien escurridas, es recomendable exprimir el exceso de agua para evitar que tus platos se vuelvan demasiado aguados. Puedes hacerlo utilizando tus manos limpias o una escurridera especial para verduras.
7. Utiliza las espinacas cocidas
Una vez que has cocido y escurrido las espinacas, puedes utilizarlas en una variedad de platos. Agrega las espinacas a una ensalada, utilízalas como relleno para tartas saladas o simplemente saltéalas con ajo y aceite de oliva para acompañar una carne o pescado.
Recuerda que las espinacas cocidas se pueden conservar en el refrigerador durante unos días. Sin embargo, es importante consumirlas lo más pronto posible para aprovechar al máximo sus nutrientes.
¡Ya estás listo para cocer las espinacas como todo un experto! Sigue estos pasos y disfruta de una verdura sabrosa y llena de beneficios para tu salud. ¡Buen provecho!