Cómo conservar remolachas cocidas
Las remolachas son un vegetal muy versátil y nutritivo que se puede utilizar en una variedad de recetas, desde ensaladas hasta sopas y purés. Si tienes un exceso de remolachas cocidas y no quieres desperdiciarlas, te mostraremos algunas formas simples de conservarlas para disfrutarlas más adelante.
Antes de entrar en los métodos de conservación, es importante destacar que las remolachas cocidas pueden durar en el refrigerador durante aproximadamente 3-5 días. Sin embargo, si deseas que duren aún más tiempo, aquí hay algunas opciones adicionales:
1. Congelación:
La congelación es uno de los métodos más comunes y efectivos para conservar las remolachas cocidas por un período prolongado. Sigue estos pasos:
– Lava y pela las remolachas cocidas.
– Corta las remolachas en rodajas, cubos o cualquier forma que prefieras.
– Coloca las remolachas en bolsas de congelación o recipientes aptos para congelador.
– Etiqueta los recipientes con la fecha de congelación.
– Coloca las remolachas en el congelador.
Las remolachas cocidas congeladas pueden durar hasta 8-10 meses. Para usarlas, simplemente descongélalas en el refrigerador durante la noche antes de su uso.
2. Enlatado:
El enlatado es otro método popular para conservar alimentos. Aquí te mostramos cómo enlatar remolachas cocidas:
– Lava y pela las remolachas cocidas.
– Corta las remolachas en rodajas o trozos.
– Hierve frascos de vidrio y sus tapas para esterilizarlos.
– Coloca las remolachas en los frascos calientes, dejando aproximadamente 2 cm de espacio en la parte superior.
– Agrega una solución de salmuera (agua con sal) caliente a los frascos, asegurándote de cubrir completamente las remolachas y dejando al menos 2 cm de espacio libre.
– Limpia los bordes de los frascos y coloca las tapas herméticamente.
– Procesa los frascos en un baño de agua hirviendo durante aproximadamente 30-40 minutos.
– Retira los frascos y déjalos enfriar en un lugar seguro.
Las remolachas enlatadas pueden durar hasta 1 año. Recuerda almacenarlas en un lugar fresco y oscuro.
3. Escabechar:
El escabeche es otra técnica de conservación popular que consiste en marinar los alimentos en una solución ácida. Sigue estos pasos para escabechar remolachas cocidas:
– Lava y pela las remolachas cocidas.
– Corta las remolachas en rodajas o trozos.
– Hierve una solución de vinagre, agua, azúcar y especias al gusto (como pimienta en grano, laurel, clavos de olor, etc.) durante unos minutos.
– Coloca las remolachas en frascos y vierte la solución caliente sobre ellas.
– Asegúrate de cubrir completamente las remolachas con la solución.
– Limpia los bordes de los frascos y coloca las tapas herméticamente.
– Deja enfriar y luego almacena los frascos en el refrigerador.
Las remolachas escabechadas pueden durar hasta 2-3 meses en el refrigerador. Son ideales para añadir a ensaladas o como acompañamiento para carnes.
4. Deshidratación:
La deshidratación es una técnica que implica eliminar la humedad de los alimentos para prolongar su vida útil. Aquí te mostramos cómo deshidratar remolachas cocidas:
– Lava y pela las remolachas cocidas.
– Corta las remolachas en rodajas finas o en chips.
– Coloca las rodajas de remolacha en una bandeja de deshidratación.
– Ajusta la temperatura del deshidratador a aproximadamente 50-60°C y déjalo funcionar durante varias horas (de 6 a 12 horas), hasta que las remolachas estén completamente deshidratadas y crujientes.
– Almacena las remolachas deshidratadas en bolsas herméticas o frascos de vidrio.
Las remolachas deshidratadas pueden durar hasta 6 meses en un lugar fresco y seco. Puedes utilizarlas como snacks saludables o triturarlas para agregar sabor a tus platos.
En resumen, si tienes remolachas cocidas sobrantes y no quieres desperdiciarlas, existen varias formas de conservarlas para disfrutarlas más adelante. Ya sea congelándolas, enlatándolas, escabechándolas o deshidratándolas, puedes aprovechar al máximo este delicioso vegetal y tenerlo a mano siempre que lo necesites. ¡No dejes que tus remolachas se vayan a perder!